Verni Salazar
El Dr.
Luis Beltrán Prieto Figueroa, en su artículo publicado en El Universal el 9 de
septiembre de 1975, con el título de “Margarita en la mira”, nos dice:” es
perentoria la adopción de medidas para la conservación del patrimonio histórico
de la isla, de sus paisajes y bellezas naturales, pero sobre todo, para
defender la cultura y la vida de los margariteños...”, tan vigente que es
importante que reflexionemos sobre estado actual de nuestra Cultura Insular, en
el entendido que Cultura, según Tylor en su “Primitive
Culture”, es: “aquel todo complejo que incluye
el conocimiento, las creencias, el arte, la moral, el derecho, las costumbres,
y cualesquiera otros hábitos y capacidades adquiridos por el hombre”, o coloquialmente como “todo lo que hace el hombre”. Tradicional e históricamente, el
temperamento particular del neoespartano, es único en el mundo, por una serie
de aspectos tan característicos, que nos hacen diferentes de los demás, así el
Dr. Fernando Cervigón en la Presentación de “Margarita 1897”, expresa: “…renegar de nosotros mismos es, prácticamente, renunciar a ser lo que
realmente somos, a nuestra condición de pueblo con una personalidad y una
identidad singulares que nos permite ser coherentes y, simultáneamente
creativos, arraigados en una tradición que asegura la fidelidad a unos valores
que hacen posible la cohesión y una estructuración equilibrada del tejido social
lo cual, a su vez, facilita una convivencia fundamentada en patrones de
conducta que todos aceptamos como válidos …”
Ahora bien,
desde nuestro punto de vista, todos los elementos que conforman el concepto de Tylor, en el caso de nuestra
Cultura insular han sido invadidos, penetrados y atacados en forma sistemática,
por un enemigo silente, sigiloso, sin rostro, que no se deja ver; pero que cada
segundo, cada minuto, cada hora, clava sus garras sobre nuestra identidad, no
tiene cuerpo pero lo sentimos a nuestro lado, está irrumpiendo poco a poco, en
nuestros espacios, nuestras tradiciones, nuestra historia, nuestro arte, nuestra forma de vida, y lo más lamentable que muchos de nosotros
mismos, le hemos dejado el camino libre, como ejemplo tenemos lo que querían
hacer con nuestra Virgencita del Valle, al tratar de imponernos un “Vallita”
que nada tiene que ver con nuestro sentir y respeto hacia nuestra protectora,
ya una vez lo lograron, con el inicio del régimen de Zona Franca, dejamos de
comer “pasteles” para comer “hallacas”.
Nos han
dividido de forma tal que se impone la “atomización de la Cultura”, cada uno de
los entes encargados de direccionar los elementos culturales, se han
convertidos en meras parcelas, están aislados entre sí, donde cada quien cuida
de que no se la invadan, varias de estas con gente que nos son de los nuestros
y ni siquiera se preocupan por aprender sobre nuestro gentilicio; los políticos
al fin están entendiendo que la cultura “si da votos” y nos la politiquearon,
todos hablan de rescate, o sea, que nuestra cultura se está ahogando, o la
están ahogando a propósito; mientras “la Ley de Cultura del Estado”, duerme
tranquila, o la durmieron?.
El Dr. Ángel
Félix Gómez, en su poema “Volver” es categórico::”Hay que volver a repoblar las costas, a alquitranar los barcos, a
gobernar la brisa, para que no se crea que hemos muerto del todo”. Hermano
ñero, quisiera estar seguro, de que esta reflexión ha tocado tu corazón, y que
formas parte de ese ejército necesario en la batalla por nuestra Cultura…no
estoy llorando: pero tengo los ojos aguaos.
cronistadediaz@gmail.com
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